Violentada la Autonomía de la U.C.V.V
EL 17 DE OCTUBRE DE 1951 ES VIOLENTADA LA
AUTONOMÍA UNIVERSITARIA.
El
ministro Simón Becerra en la memoria y cuenta que presentó expresa que la
Universidad Central de Venezuela se
encontraba dentro de las instituciones patrias que son responsables de los
destinos de la educación pública de nuestro país y por eso hizo las siguientes
consideraciones en 1953:
1.-
La responsabilidad del gobierno se aprecia, entre otros factores por el interés
que le merezca la eficiente preparación
profesional que requería el país.
2.-
La U.C.V. venía desentonando dentro del desarrollo ordenado y progresivo que
tiene el país desde 1948.
3.-
Hubo un incremento de los desórdenes internos, que trascendieron a la
colectividad con marcada resonancia política.
4.-
Estas razones lo llevaron a iniciar la
reforma universitaria.
Es la justificación del gobierno para el
atropello y violación de que fue víctima
la Universidad y los miembros de la comunidad universitaria (estudiantes
y profesores).
El
ministro Simón Becerra tomó las siguientes medidas:
1.-
Se suspendieron las actividades docentes para tratar de restaurar el orden y la
“irresponsable actitud de sectores del profesorado que se prestaron
al igual que dichos estudiantes a turbios manejos de carácter político”.
2.-
La creación del Consejo de Reforma al que se le dio “facultades
suficientes para llevar adelante la
reorganización técnica y administrativa del Instituto”.
3.-
El 17 de octubre de 1951, al no quedar
según el ministro ninguna otra forma de controlar la situación de la
U.C.V, se dictó el decreto 321 con el cual se intervino la universidad, derogando el Estatuto Orgánico las Universidades
nacionales y creando el Consejo de Reforma que se encargó del gobierno de la
universidad, es decir, sustituyó la Consejo Universitario, a los Consejos de
Facultades, a los Decanos y Directores de Escuela, y además podría sancionar
con expulsiones o suspensiones hasta por 3 años, en otras palabras fue como un Dios Todopoderoso por las facultades que
tenía y porque no se debe olvidar que sus instituciones eran las mejores.
Como
un golpe de muerte a la Autonomía de la U.C.V. fue considerado este infausto
decreto según la opinión del Dr. Rene de Sola en vista de que:
“La
autonomía es uno de los principios más íntimamente unidos a la existencia de la
universidad venezolana (…) fue reconquistada casi plenamente mediante la
promulgación del Estatuto Orgánico de las universidades nacionales en 1946, era una aspiración
largamente acariciada por el profesorado y el estudiantado del Instituto y el
resultado de las luchas iniciadas de la desaparición de Gómez (…)
La
autonomía (…) fue un triunfo de la universidad
venezolana.
Los
años de vigencia (…) la universidad obtuvo innegables beneficios tanto en el
aspecto cultural y científico como en lo docente y administrativo. Naturalmente
que la sola autonomía no podía traer de la noche a la mañana la reforma total
de la universidad (…) La autonomía es el clima necesario para la realización de
la reforma universitaria”.
No
debe confundirse el concepto de reforma universitaria con el de autonomía
universitaria, porque la reforma implica un proceso y evidentemente es sano que
la universidad disfrute de cierta autonomía administrativa, pero dentro del régimen
de vida institucional de la nación.
Ahora
es conveniente mencionar las razones que llevaron al gobierno provisorio a esta
intervención. Argumentaron fundamentalmente dos: la primera se refiere a la
hipotética existencia de una opinión pública predispuesta contra la autonomía,
naturalmente, esto se debió al bombardeo de informaciones que les llegaba
contra la universidad a través de los medios
de comunicación bien manejados a favor del régimen como en realidad la
universidad era el único lugar donde directamente se adversaba al régimen y sus
atropellos, naturalmente esto la convertía en la piedra del zapato del
gobierno.
La
razón real de esta intervención fue básicamente político – ideológica, porque hay
individuos pensantes, capaces de razonar y cuestionarse las situaciones en que viven y que son propias de
una dictadura.
Luego
de esto, el día 1° de septiembre de
1951, se nombraron nuevas autoridades de
la Universidad Central, por resolución del Ministro de Educación Simón Becerra, fueron designados:
el Dr. Eloy Dávila Celis, como Rector, el Dr. Luís Eduardo Arocha como Vicerrector
y el Dr. Emilio Spósito Jiménez como
Secretario.
Por
lo tanto, la intervención de que fue víctima la
Universidad Central de Venezuela el 17 de octubre de 1951, no solo dejó
la Institución sin lo más sagrado, que era su autonomía, sino que además
interrumpió el proceso de reforma que se venía desarrollando dentro de la Universidad.
Para
saber más:
Autora:
Dra. Eleonora García Rodríguez.
Texto:
La intervención a la U.C.V. en 1951.
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